En esta área se valorarán los cuidados sanitarios necesarios para la estancia en el Centro. Se registrarán todos los controles y cuidados llevados a cabo con el residente.
Dentro de los controles:
En principio se realiza una valoración psicológica para evaluar que áreas cognitivas están más deterioradas y cuales están mejor preservadas.
En base a esta valoración se elabora un programa de actividades individualizado dirigido principalmente a mantener las capacidades preservadas y a mejorar en la medida de lo posible las más alteradas.
El objetivo de estas actividades es:
También se realizan actividades de tipo grupal: todos los días se lleva a cabo un grupo de revitalización donde hay una primera parte de estimulación física y una segunda parte de estimulación cognitiva.
En ocasiones vienen grupos de voluntarios los cuales cantan ó bailan lo cual les sirve como entretenimiento y terapia.
Al fin y al cabo se pretende que los pacientes estén entretenidos a lo largo del día y que se relacionen con sus compañeros, para establecer nuevos lazos de amistades y permitiendo un periodo de descanso para sus familiares.
Dentro de los servicios socio-sanitarios destacar la asistencia médica, imprescindible para la buena salud de los pacientes.
En esta área se realizarán informes médicos y valoraciones geriátricas, tipo de manutención a seguir para cada paciente como el seguimiento y control de la medicación que el paciente recibe.
Se actuará conjuntamente con el psicólogo, fisioterapeuta y enfermería para coordinar las pautas a seguir tanto física como cognitiva.
En el área de fisioterapia se pretende conseguir la mayor independencia e integración del paciente a su medio sociofamiliar, aprovechando las capacidades que todavía están presentes e intentando anular las secuelas invalidantes propias del envejecimiento. Para ello es preciso evaluar previamente las deficiencias, discapacidades y minusvalías del paciente y elaborar un tratamiento individualizado y específico para las necesidades de cada paciente.
La rehabilitación puede actuar ante:
La participación de la Trabajadora Social es clave para una comunicación más cercana con los pacientes y familiares. Valorando las necesidades y los recursos sociales, así como carencias en el
hogar (barreras arquitectónicas), que puedan impedir las actividades básicas de la vida diaria.
Por ello se realizan informes y valoraciones sociales, los cuales les pueden ayudar a la tramitación de prestaciones sociales.
Además estas valoraciones se incluyen en el Plan Anual Individualizado compuesto por todo el equipo sociosanitario.